Las tablas
Cuando ninguno de los dos jugadores consigue
hacer un jaque mate a su adversario, la partida finaliza en tablas. Esto quiere
decir que se ha producido un empate, independientemente de la ventaja material
que haya sobre el tablero.
¿Cuándo se produce el resultado tablas?
Hay una serie de razones reglamentarias por
las que se produce el resultado de tablas:
1- En caso de rey ahogado (que estudiaremos
en el apartado siguiente)
2- Por acuerdo entre los dos jugadores
3- De acuerdo con la reclamación de uno de
los dos jugadores, cuando la misma posición se ha repetido tres veces.
4- Cuando uno de los jugadores lo solicite
por haberse hecho cincuenta jugadas sin que se haya capturado ninguna pieza, ni
se haya avanzado ningún peón. El número de jugadores se puede aumentar para determinadas
posiciones, siempre que hayan sido fijadas por el Reglamento Internacional de
Ajedrez.
5- Cuando no haya piezas suficientes para que
uno de los dos contrincantes pueda hacer jaque mate a su adversario, por
ejemplo:
a- Rey contra rey
b- Rey y alfil contra rey
c- Rey y caballo contra rey
d- Rey y alfil contra rey y alfil, cuando
ambos alfiles van por casillas del mismo color.
El rey ahogado
La partida de ajedrez acaba en tablas cuando
el bando al que le corresponde jugar, sin estar su rey en jaque, no puede
realizar ninguna jugada legal.
Por ejemplo, en los imágenes anteriores
corresponde jugar al negro y no puede hacer ninguna jugada, ya que todas las
casillas a las que puede ir el rey están dominadas. En el caso de la segunda
imagen tampoco pueden moverse las otras piezas de que dispone el bando negro.
Las posiciones de tablas por ahogado son
bastante corrientes entre los principiantes, cuando después de conseguir una
importante ventaja material caen en “la trampa” de las tablas por ahogado. La
manera más efectiva de evitar este tipo de tablas, tan desagradable para el
bando que tiene la ventaja material, es, simplemente, fijarse: no precipitarse
al jugar.
Pongamos, pues, en práctica una de las reglas
básicas para jugar una partida de ajedrez:
En el ajedrez se ha de pensar siempre antes
de hacer una jugada, nunca hemos de precipitarnos por muy ganada y sencilla que
parezca la posición.
Esta norma nos puede ahorrar un gran número
de derrotas o de tablas no deseadas.
Recuerda:
- Si pides tablas a tu contrincante, no
puedes retirar la petición hasta que responda o bien haga su jugada.
- Cuando a uno de los dos bandos sólo le
quede el rey, ten cuidado, hay riesgo de hacer tablas por ahogado.